viernes, 30 de enero de 2009

Mundos diferentes

Los tiempos cambian, al igual que el viento pasado ya no más vuelve a pasar.
La historia forma la historia, y el perdón de los ancestros ya nunca llegará por la ruptura de la tradición, no sino otra, que el respeto por un siglo mutilado y vacío, ya decadente en el pasado, ya olvidado.
Derecho pasivo, natural y otorgado, establecimiento de derechos universales, y un sinfín de iconoclasia perdida en los anales humanos.
Las puertas, pesadas y blindadas, se cierran con llave. El vecino pierde su categoría por la de un desconocido, y el murmullo de los niños jugando en el parque detrás de una pelota quiebran por el incontenible vaivén de los vehículos. El aire no huele a aire, los pájaros están enjaulados, y excepto una nube púrpura y algún avión, nada surca el cielo.
Aquello que antaño era naturaleza, ahora es espacio protegido, aquello que un día fue nuestra madre, ahora es una anciana decrepita encerrada en una residencia olvidada por sus hijos, aquello que no tenía dueño, ahora tiene nombres y apellidos.
Los artesanos de la vida, ahora son sombras lujuriosas vestidas con alambres enmarañados, los retratistas de ideas sufren quijotismos presentes, la magia es fuente de pecado y los sueños tan solo son instancias en habitación blanca acolchada.
Cultos venerados ahora son despreciados, dioses páganos ahora son absurdos recovecos de un laberíntico recuerdo, tradiciones ya acabadas son epítetos perfectos de incultura, y mientras nuestra concepción nihilista crece por segundos, destruimos, arrasamos, quemamos, encolerizamos a nuestra madrina, dádiva de sustento.
Solo queda acción pertinente. Reír.
Reír, y reír a carcajadas, por la destructa cultura que nos pertenece, ya que no alabamos dioses paganos, no rezamos a los cielos para que nos riegue con su lluvia, no bailamos y cantamos junto a una hoguera suplicando por nuestros campos. Somos seres racionales, somos creadores propios, somos cultos, somos perfectos humanos.

1 comentarios:

eclipse de luna dijo...

Y ese perfecto humano es el peor enemigo de él mismo y el de todas las especies...
Me gusto mucho tu post.
Un besito y una estrella.
Mar